Es sencillo, porque el tímpano es una pequeña membrana que recibe las ondas sonoras y vibra para poder pasarlas a través del oído interno y luego al cerebro. Para que pueda vibrar libremente debe tener la misma presión de aire tanto adentro como afuera y resulta que cuando cambiamos de altura (ya sea bajando o subiendo) los cambio de presión de aire aprisionan al tímpano y por eso duele y a veces pareciera que escucháramos todo con volumen bajo.
Lo bueno es que somos una maquina adaptada para casi todo y la naturaleza creo una forma de equilibrar estas presiones de aire, nosotros tenemos un pequeño tubo que va desde la garganta hasta nuestros oídos internos y cuando existe una diferencia de presión lo que hace es que pasa aire a través de este tubo (sacando o metiendo aire) para que exista la misma presión y el tímpano pueda volver a estar libre. Por eso es bueno bostezar o tragar cuando nos pasa eso para poder ayudar a que ese tubo que esta en nuestras gargantas se abra y pueda pasar el aire hacia nuestros oidos.
AARÓN
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